La tipología de los personajes se corresponde con otras obras de Manuel Gago. Purk, moreno y de cabellos ondulados, es equiparable físicamente a el Guerrero del Antifaz, aunque al ir con el rostro descubierto y el cabello largo le hace parecerse más a Don Luis el Conde de los Picos. Lila es idéntica a Ana María, Catak a el Conde de Roca, Tugor a Alí Kan, etc.

Por otra parte, los personajes de Manuel Gago tienden a tener todos la misma fisonomía, distinguiéndose principalmente por sus peinados y su vestuario. En este aspecto, el dibujante lo tenía más difícil que de costumbre, ya que al transcurrir la acción en la Edad de Piedra, el vestuario se reduce al mínimo. Sin lugar a dudas, nunca en los tebeos hispanos se había visto tanta superficie de piel humana, cosa que la censura se encargaría de corregir drásticamente a partir del sexto episodio de la serie.

También observamos aquí otra característica habitual en el autor: los "buenos" tienen los cabellos rizados u ondulados, el rostro barbilampiño o, en el caso de los ancianos como Catak, con una cuidada barba, y parecen ir perfectamente depilados. Por el contrario, los "malos" (Tugor, Mamok y Gran Urulu) tienen cabellos lacios y despeinados, barbas hirsutas y pilosidades en el pecho, brazos y piernas.

Los vestidos se limitan a taparrabos de pieles y mocasines para los hombres, mientras las mujeres se cubren algo más, desde el pecho hasta la mitad de los muslos, cosa ya bastante atrevida para la época y el país. Sólo Tula luce un atuendo algo diferente, un "dos piezas" que deja ver parte de su vientre.

En cuanto a las armas, vemos en este primer episodio lanzas de madera afilada, hachas y mazas de piedra, y un puñal del mismo material que, por cierto, ¡Purk no desenfunda en sus luchas, ni con la fiera ni con los gigantes!

Aunque Gago no dibuje ningún plano general de los poblados, podemos apreciar que las moradas son principalmente cuevas, aunque al parecer la vivienda de Catak y sus hijos sea una cabaña construida con troncos.

En el guión hallamos todas las características habituales en Pablo Gago, es decir, sencillez e ingenuidad, muy lejos de las complicadas tramas y relaciones personales que urdía Pedro Quesada. Ni Purk ni Lila parecen tener madre. Los viudos tienen una larga tradición dentro del cómic y del relato de aventuras en general, pero en esta ocasi?n no se hace ninguna mención a la existencia de una esposa para Catak o el Gran Urulu.

Es la obra más imaginativa de Gago. Los hermanos de Manuel Gago, Pablo y Luis, ayudaron a éste en la realización de muchas de sus series. Pablo, que era invidente, en Purk realiza un gran guión, que se puede poner como ejemplo de cómo hacer un guión preciso y sin dejar ningún hilo suelto. Por otro lado, el hijo de Manuel, M. Gago Quesada, continuó la serie.