La historia se sitúa en una idealizada edad de Piedra. Purk, a quien apodan "El Hombre de Piedra", es el hijo del jefe de la tribu de los Cataks, que vive en las montañas. Purk es fuerte como una roca, noble como un diamante.

Lila es la hija del Gran Urulu, otra tribu que vive en el valle, y no es muy amiga. Ambos jóvenes están enamorados y se citan en secreto. En una de esas citas, Lila le dice a Purk que su padre quiere entregarla, contra su voluntad, a uno de su tribu llamado Tugor.

Este es un individuo malcarado, que ha seguido a la joven y sorprende a los dos amantes. Purk le vence por dos veces, dejándole sin sentido y acompañando luego a la muchacha hasta su poblado.

De vuelta al poblado de los Cataks, le sale al encuentro una jovencita llamada Dahe, que está enamorada de él, pero Purk la evita y penetra en la cabaña de su padre Catak, el cual se halla acompañado de Tula, la hermana de Purk. Catak y Tula le explican que Mamok, jefe de otra tribu vecina, ha lanzado un desafío: luchará contra los tres hombres más fuertes de la tribu de los cataks, y si resulta vencedor se llevará a Tula para él.

Cuando Mamok se presenta en el poblado, Catak es el primero que quiere enfrentarse a él. La lucha se desarrolla con lanzas y escudos, y Catak no tarda en caer herido. Entonces es Purk quien toma la lanza de su padre y continúa la lucha, y esta vez es Mamok el que es derrotado, y sus guerreros tienen que llevárselo desvanecido.

Más tarde, Purk corre al poblado de los Urulus, con la intención de pedirle su hija al Gran Urulu, pero cuando llega ve que están celebrando una fiesta, y escondido en lo alto de un gran árbol, observa que se va a llevar a cabo un combate entre Tugor y otros dos hombres que también pretenden a la bella Lila. Tugor resulta vencedor, tras matar despiadadamente a los dos pretendientes, y acto seguido Lila es conducida junto al feroz Tugor, para que su padre realice la ceremonia, sin que sirva de nada que Lila llore y suplique. Pero entonces irrumpe Purk, y antes de que ningún Urulu pueda impedirlo, coge en brazos a la muchacha y huye saltando de árbol en árbol.

Urulu, Tugor y los suyos reaccionan pronto y emprenden una enconada persecución. Purk, aún con Lila a cuestas, les deja atrás. Pero de repente les corta el paso una monstruosa fiera parecida a un león y Purk se enfrenta a ella con las manos desnudas y le estrangula con sus fuertes brazos.

Pero el tiempo que ha perdido hace que casi le alcancen sus perseguidores, y vuelve a emprender la carrera, llevando siempre a Lila. En el último momento, se encuentran frente a un profundo precipicio, pero Purk lo salva de un prodigioso salto, que los que les siguen no se atreven a intentar.

Más tarde, los dos muchachos se encuentran descansando, cuando aparecen cinco hombres de estatura gigantesca que les acusan de ladrones y quieren detenerles. Purk lucha y les vence a todos, pero después se da cuenta de que Lila ha desaparecido de su lado. Mientras tanto, Urulu y los suyos colocan un tronco de árbol sobre el barranco y logran cruzarlo.